el hotel living es un refugio encantador en un barrio residencial, rodeado de naturaleza y tranquilidad. el servicio fue excepcional, con un equipo siempre amable y servicial. disfruté de la mini cocina en el cuarto (perfecta para preparar snacks) y de la proximidad a varios supermercados, lo que facilitó las compras.

algunas opciones de desayuno podrían mejorar (variedad y calidad) 🍽️.

Atmósfera calma para relajación.

Hospitalidad excepcional en Berlín

Disfruté de un ambiente tranquilo y cómodo, con un personal siempre amable y servicial. Además, el garaje del hotel facilitó mucho nuestra experiencia en la ciudad.

El desayuno tuvo opciones limitadas que no fueron muy satisfactorias. Además, noté que la limpieza podría mejorar en algunos detalles.

El servicio amable del personal realmente destaca.

Tuve varios problemas con la limpieza de mi habitación. Encontré cabellos en el baño y polvo acumulado en las esquinas. Además, el desayuno era bastante pobre en opciones y no cumplió mis expectativas.

Cocina equipada, Proximidad a parques, Balcón pequeño

Muebles y decoración antiguos, el aire acondicionado inconsistente afectó mi comodidad!!! Las ventanas abiertas solo van a atraer ruido del tráfico, por favor, una revisión profunda de limpieza!!! Necesitan más enchufes, es un lío.

Sin tonterías, aquí va la verdad

El hotel cuenta con una buena ubicación en un barrio residencial tranquilo, aunque la decoración y muebles son un poco antiguos y requieren mejoras. Además, la conexión al centro es conveniente, pero el viaje toma tiempo. La atención del personal varía y la falta de opciones diversas en el desayuno dejó algo que desear.

Lo mejor fue el gym, abierto 24/7, y el detalle de las cervezas gratis en la habitación. La atención puede mejorar. pedí una cerveza y no reponían. El desayuno tampoco es muy variado. 🍻

el hotel tiene un ambiente tranquilo y limpio, pero el desayuno es limitado.

Ideal para escapadas familiares

La habitación era super amplia y moderna, con una mini cocina equipada perfecto para preparar desayuno y, con suerte, evitar precios altos en restaurantes. Además, el desayuno buffet era generoso, aunque un poco a la misma nota cada día.

No fue barato, pero aceptable considerando la calidad del servicio.

Estuve en el Living Hotel Weissensee y me encantó la kitchenette en la habitación. Tenía todo lo necesario para cocinar y ahorrar en comidas. El microondas funcionó bien y el balcón pequeño me ofreció un espacio agradable para respirar aire fresco. Las camas eran extremadamente cómodas, lo que hizo que mis noches fueran perfectas. Aunque el aire acondicionado no funcionaba, abrir la ventana ayudó a que circulara un poco de aire. Por otro lado, el desayuno dejó mucho que desear, ya que había poca variedad y las veces que pedí algo seguían sin reponer. Los problemas de limpieza también fueron un inconveniente. Encontré polvo en algunos lugares y eso me hizo sentir incómodo. A pesar de eso, el ambiente del hotel era tranquilo y las instalaciones estaban bien mantenidas.

descubre un remanso de paz con cocinita y cervezas gratis a tu llegada

El Living Hotel Weissensee es una joya en Berlín, con habitaciones amplias y acogedoras. La kitchenette permite ahorrar en comidas y disfrutar de un ambiente hogareño. Además, ¡las cervezas de bienvenida son un detalle encantador!

El hotel tiene un jardín espléndido y un bar al aire libre genial para relajarse. El servicio de limpieza es eficiente y me sentí muy bien atendido. La cocina está perfectamente equipada, ideal para preparar algo cuando uno no quiere salir.

Podría mejorar la variedad de opciones en el desayuno.

Este lugar me queda perfecto y tiene todo lo que necesito, wi-fi, cocina equipada y un balcón pequeño para disfrutar del aire fresco. En mi primera visita, el personal me ayudó enseñándome buenos lugares para comer. ¡Volveré por un fin de semana!